Tenía pendiente desde las últimas entradas de esta sección "anti-blockbusters" el darle un repaso a la última entrega de La Jungla, una cuarta entrega que si bien cumplió con los fans en general, no tuvo ni mucho menos el impacto esperado. Con tantos comebacks en los ultimos años de sagas de acción miticas, Rambo, Rocky y ahora McClaine(si no a vuelto Chuache es por estar en politica),parece que los viejos rockeros se resisten a retirarse.
La peli parece en general un guión de Terminator tuneado para la vuelta de Bruce Willis a su personaje icono, y hay unas cuantas cosas que parecen no terminar de encajar en general.
Si fuera poco el hecho de que tenga que proteger durante toda la peli al informático de turno, como si fuera el T-1000 con John Connor, la escena de la parte final de la persecución en camión nos deja claro en donde se han inspirado a la hora de escribir el guión, además de algún guiño por el camino. Esa carrera de camión versus F-35 me parece mucho más de Terminator o Schwarzenneger en general que de John McLaine, al que mola más verle en un ambiente urbano, o en espacios reducidos, y no intentando esquivar misiles conduciendo un camión, una escena que acaba resultando tan ridicula como aquella de Speed en que Sandra Bullock hace saltar el autobus por la autopista inacabada. Las fantasmadas de McLaine no eran tan pasadas de vueltas, ¿no?
La primera escena en que aparece Willis es un poco cortarrollos: va en busca de su hija, que se está dando el lote en un coche con un maromo, y saca al chaval para cantarle las cuarenta. Los problemas familiares de John tuvieron un papel fundamental en las dos primeras partes, no tanto en la tercera, pero aqui, asi como para empezar, deja la impresión que McClaine se ha convertido en un poli perdedor, no tanto como al inicio de la tercera, pero por alguna razón aqui me ha dejado mucho peor sabor de boca.
La hija de McLaine, interpretada por Mary Elizabeth Winstead, resulta siendo una de las cosas salvables de la peli, pero ya llegaremos a eso.
Luego McLaine va a buscar al hacker al que quieren matar los malos, primer tiroteo, primeras fantasmadas para que las pruben los de "Cazadores de Mitos" (si le disparas a un extintor, explota a lo bestia?), y ya tenemos la eterna carrera en marcha. A partir de ahí, mucha persecución, mucho "colegueo" entre los dos, la diferencia de edades, bla, bla, otro tiroteo, más fantasmadas (más para los "Cazadores de Mitos" utilizar un surtidor de agua para tirar a un tipo del helicoptero, o, claro, la favorita de todos, hacer explotar un helicoptero con un coche), luego Kevin Smith para hacer más felices todavia a los fanboys, la carrera con el camión perseguido por un F-35 que le dispara misiles, pelea final y todos a casa contentos... o no tanto.
Yo creo que el problema principal para que la peli funcione como es debido es el villano de la peli: Timothy "llevo un palo metido por el culo y por eso camino tan recto" Olymphant, no es precisamente un tipo carismático. No lo era ni en Deadwood, aqui menos todavia. Hasta el general chungo de la segunda parte parecia un villano más convincente que este mago de los teclados despechado, con esas miradas "acero azul". Además, el hecho de que loa malos sean informáticos, por mucho que se saquen de la manga a Maggie Q como mujer total, que esta buena, experta en hackeo, y experta en artes marciales, parece muy poca cosa. Por supuesto, mola más verla a ella, que al chino con bigote de la primera parte, pero podrían haberle buscado a McLaine otro contrincante con un poco más de carisma o por lo menos, que parezca más sádico como el gran Hans Gruber.
La peli es más o menos entretenida con tanta carrerita para arriba y para abajo, pero , en comparación a las otras, se queda muy corta. Willis y su sidekick están bien, así como la hija de McCLaine, que en la parte final demuestra que ha salido al padre, son los que consiguen que la peli se salve del desastre. Pero tanto los villanos, como todos esos agentes del FBI que no hacen más que mirarse unos a otros con los brazos en jarra, hacen que la peli no acabe de darnos ese chute de adrenalina que se le supone. Y todo eso sin ni siquiera mencionar toda la politica que lleva esta peli, ya desde su titulo original, "Live Free or Die Hard".
Por eso, aunque tampoco es la patraña de película que podría haber llegado a ser, no llega ni de broma al nivel de las tres anteriores.
Creo que con esta ya está bien, pueden dejar dormir a McClaine de una vez.
0 comentarios:
Publicar un comentario