Llego tardísimo, y reconozco que me ha costado un poco entrar en el exagerado y extraño mundo del Doctor, pero una vez enganchado, gracias a la edición de la serie en DVD de la serie, es muy dificil resistirse a otra de las aventuras del clásico personaje inglés y su nueva acompañante. Ciencia ficción inglesa, muy inglesa, protagonizada por un carismático actor inglés que actúa de forma exagerada, como si estuviera en el teatro en vez de en una serie de televisión, y humor, mucho humor. Y un punto de mala leche.
Quien es el Doctor? pues es un tipo que con su maquina del tiempo y el espacio viaja por todas las épocas y lugares, normalmente preveyendo ataques contra los indefensos y arreglando injusticias. Viaja con una chica de Londres, Rose Tyler, una poligonera de tomo y lomo que flipará con sitios como la nave desde la que se ve el fin del mundo, o con personajes como los repugnantes Slitheen.
Tampoco me quiero explayar aqui mucho, porque ya lo ha hecho JJ en su Torre del Reloj más y mejor; sólo dar un empujoncito a aquellos que, como yo al principio, veían en Doctor Who un montón de bichos de latex, actuaciones pasadas de vueltas y nada más. Y aunque es verdad que todo eso está, lo de los bichos de latex es bizarrisimo, hay un espíritu de aventura divertida que es muy recomendable en esta era de la tele en la que si te pierdes un episodio de la serie que sigues te puedes dar por perdido. Los guiones son realmente buenos, quizás no tanto por las tramas en si, que al fin y al cabo son la excusa, sino por la relación que crea entre el Doctor y su peculiar manera de vivir la vida, y el mundo, especialmente su compañera de viaje, Rose. Ha sido un acierto mayusculo el enchufar en una serie con aspecto tan retro (desde la Tardis, hasta el propio aspecto de los doctores previos) a una chica de ahora, real, que podemos ver en cualquier calle de cualquier ciudad británica.
Además de Rose, a la que interpreta la cantante Billie Piper, hay unos cuantos secundarios recurrentes bastante molones entre los que destaca el Capitán Jack Harness, un timador vivalavida bisexual, que posteriormente tendría su propia serie en Torchwood, o Harriet Jones, diputada por Flydale North, una mujer tremendamente decidida que no tiene miedo a los aliens ni a nada.
Eso sí, el alma matter de la serie es el Doctor, el noveno de la extensa saga en la tele británica, al que interpreta en esta primera temporada Christopher Eccleston, carismático y exagerado, aunque ni tan carismático ni tan exagerado como el que sería su sucesor en el resto de temporadas de la serie. A pesar que a la mayoria le mola más ese sucesor, David Tennant, a mi me ha quedado un recuerdo fantástico de la actuación de Eccleston, y de su trabajo en volver a poner de moda al Doctor.
Sólo puedo decir más que ya estoy con la segunda temporada, enganchado a las aventuras interestelares del viajero más elegante. No lo dejeis escapar.
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