
Se veía venir, claro. Este subgénero que parece acaparado por Uwe Boll y Paul Anderson parece una apuesta segura en cuanto a pelis malas se refiere, y prácticamente todo de este proyecto daba a pensar qeu no iba a ser diferente esta vez: Kristin Kreuk, la Lana Lang que le ponia ojos melosos al joven Clark en Smalville, como Chun Li, no parecía la mejor de las opciones como protagonista. El director de Doom y un guionista que lleva 6 años sin escribir nada, no inspiran tampoco demasiada confianza. La puntilla es que uno de los Black eyed Peas interprete al asesino cañí, Vega, y tener que soportar al insoportable Chris Klein.
Es mala, mucho, un sinsentido en el que Bison es ahora un capo de un entramado financiero, que se compra el barrio más pobre de Bangkok (?) para transformarlo en un sitio de superlujo (!!). Para eso necesita, por alguna razon indeterminada, tener secuestrado durante 15 años al padre de Chun Li. La chica conoce despues de la muerte de su madre a un sensei qu ele enseña en tres semanas, como un curso CCC acelerado, todo el kung fu que necesita para patearle el culo a Vega, el asesino rival. Ah, y tambien hace una especie de bolas de energia, pero eso le cuesta más.

No es aburrida del todo, ni tan divertidamente mala que es buena, como DOA, se queda en ese extraño punto entre "pérdida de tiempo" y "bah".
2 de 10
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