Catwoman #69 - #77

OJO! CONTIENE UN SPOILER IMPORTANTE. OJO!

Muchos meses sin leer a Selina... y algunos cambios en la colección, debo decir que no para mejor.
Estos ocho número se podrían dividir en tres partes, la primera de ellas ocuparía del #69 hasta el (infame) #72, y aqui es donde se gesta el gran cambio de la serie.

Hasta ahora Will Pfeiffer y David Lopez estaban haciendo un buen trabajo en la serie, en general. Los argumentos no eran para tirar cohetes (especialmente en el año después, a pesar de todo) pero tampoco era una debácle mensual como Nightwing, se trataba de una serie entretenida que seguía de buen gusto por estar protagonizada por uno de mis personajes favoritos de DC. Lopez también esta más que correcto, con algunos arranques de brillantez como las composiciones del arco de Film Freak, de hecho cada vez está mejor. Hasta aquí, bien.

Y así llegamos a este punto, en que Pfeiffer (o Didio, o el editor de turno)tira por la borda todo.
Tira por la borda al personaje, tira por la borda los sesenta y pico números.
Tira por la borda a Helena.

Básicamente, hace que Selina quiere tanto a su hija, que decide darla en adopción, con ayuda de Bruce (?!!), para que no pueda salir herida en un intento de algun villano para llegar a ella.

Por que hacer madre a Selina, si al año vas a desmenuzar al personaje? porque convertir en débil a una mujer que ha demostrado ser tan fuerte? tan poco conoce al personaje?

Me ha parecido una oportunidad muy importante, y que podía hacer de la serie algo extraordinario, totalmente desaprovechada, esta claro que Pfeiffer no sabía que hacer con el bebé y ha decidido tirar por el camino más facil, que es sacarlo de en medio. Veremos si es algo temporal , hasta que acabe la próxima megacrisis o lo que sea, pero, en mi opinión, ha quedado tocada tanto la serie, como la reputación del guionista. Esta claro que aquella portada en que se homenajeaba al Lobo Solitario y su Cachorro no le inspiró para nada.

El caso es que sin el bebé (pero con algun que otro ocasional cargo de conciencia, al menos), la serie se vuelve... Nightwing.
Y es que a Selina le queman la casa, como le sucedía a Dick Grayson en el 90 y pico de su colección,y , igual que a aquel le pasaba, lo dejan con lo puesto, pierde a su familia, pierde todo... y el camino esta libre para que se corte el pelo y vuelva a ser "la de antes".
Lástima que ese personaje ha evolucionado en los últimos seis-siete años, desde que Darwyn Cooke reiniciara la colección y ahora es una mujer muy diferente.

En fin que en los números 73 y 74 la vemos pelearse con un malo supuestamente muy malo, trama que queda colgada de momento gracias a la incorporación de Selina al evento villano Salvation Run. Esto ocurre desde el 75 al 78 (que aparece...hoy!) y es otra prueba más de que no saben que hacer con el personaje. No saben si hacerla buena o si hacerla mala, no tienen ni idea de por donde tirar.

Pfeiffer tiene, a pesar de todo, calidad, y aunque la trama es absurda (Selina en una especie de mundo en el que ella es más fuerte que nadie), es entretenida y tiene algunas salidas buenas.
Gracias a los,como digo, cada vez mejores lápices de David Lopez la serie mantiene el tipo.

Veremos si tras las Crisis que acabarán con todas las Crisis, Pfeiffer o quien sea recapacita y devuelve el rio a su cauce, Catwoman siempre ha sido una serie que se ha caracterizado por una evolución en los personajes y por tratarlos de una manera seria y adulta, al fin y al cabo son humanos antes que superhéroes.

La serie en general, 7 de 10. El camino que han tomado, un 0.