La nueva pelicula dirigida en solitario por Oxide Pang (de los famosos Pang Bros. ) es The Detective, un film a medio camino entre el thriller paranormal y el noir clásico protagonizada por un Aaron Kwok estelar.Ultimamnete de capa caida, el cine de los dos hermanos puede recuperar gracias a esta buena peli parte del prestigio que se ha ido diluyendo en sus ultimas pelis, mediocres incluso para sus seguidores.
Tam es un joven detective privado de tres al cuarto.Un dia se presenta en su oficina un tipo en no muy buen estado, que le pide que investigue a una mujer llamada Sum, que según él, le ha amenazado.
El detective coje el dinero del cliente sin pensarlo mucho, y al comenzar a investigar se empieza a topar con extrañas muertes.
El nombre de los Pang equivale normalmente a cinta de terror más o menos decente, pero esta vez Oxide nos da mucho más que eso.
El film es una pelicula policiaca en toda regla,construida con la estructura típica del género, en el que el detective se va abriendo más y más puertas según investiga el caso, y según va uniendo piezas en el puzzle que representa, en este caso, el misterio de la identidad de una mujer. No falta ninguno de los elementos comunes en el noir, ni siquiera la femme fatale, aunque en este caso sea un poco especial.
La gracia es que además de las típicas escenas de "investigación" tenemos unas cuantas persecuciones que no están nada mal, en especial un seguimiento a pie que me recordó en cierta manera a las emocionantes escenas de una de las mejores peliculas HK del año (que aún no he reseñado, para mi verguenza) , Eye in the Sky.
Así seguimos a Tam, un detective muy peculiar en sus pesquisas, que no duda en hacerse pasar por quien sea (incluso por un policia) para conseguir información, o de utilizar un método tan primitivo como el de la señal en la bisagra de la puerta para saber si ha habido movimiento en cierto apartamenteo.Una variedad de recursos bastante notable es la que reune esta peli, que hasta cierto punto parece un manual de los trucos del investigador.
Visualmente la peli me ha encantado,lo más notable me parece la crudísima fotografía, que le da al film un toque muy personal al mezclar esa luz cási cegadora con los tonos de las estrafalarias camisas del protagonista, o la extravagante decoración de algunos de los lugares donde se desarrolla el film.
Y por supuesto, no faltan las tipicas sorpresas marca de la casa, esta vez en la forma de un plano a una fotografía que se torna viva , un efecto muy bien conseguido.
Aaron Kwok esta simplemente sensacional en el papel protagonista, el lleva todo le peso de la película, apenas deja de salir en algunos minutos.
Ha conseguido darle una personalidad muy especial a este detective de barrio que sabe como encandilar a la gente para que le de información y que no deja de seguir tirando del hil apesar de que parezca que la madeja no traerá nada bueno.
Le han dado a su personaje un pasado trágico para buscar que conectara más con el caso que investiga, algo innecesario puesto que el misterio por si mismo esta bien construido, un detalle negativo que olvidamos rápidamente gracias a la interpretación genial del actor.
Aunque tiene un giro al final que se podría haber ahorrado, porque me parece innecesario para el interés del espectador, esta es una pelicula no solo entretenida, sin que además está bien hecha, alineación cósmica difícil de encontrar, incluido en el cine de los hermanos directores.
Un Pang de los buenos.
8 de 10
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